A pesar de que el asilo se niega desde hace tiempo a personas condenadas de “delitos particularmente graves”, la nueva regla añade una larga serie de crímenes como factor de descalificación, tales como: violencia doméstica —como delito grave o menor—, agresión, reingreso ilegal al país, robo de identidad, fraude de prestaciones públicas, tráfico de inmigrantes y conducir bajo los efectos de alcohol o drogas.
Las reglas también negarían el asilo a personas condenadas por crímenes que un Juez “sepa o tenga motivos para creer” que fueron cometidos a fin de apoyar a una pandilla callejera.